En la UBA se le da poco y nada de importancia y a veces me da la impresion de que la mayoría de la gente cree que el diseño nace por generación espontánea. No sé si el problema en tener una formación viendo cosas está en los docentes o en los alumnos, pero creo que hay culpa en ambas partes. Pasa algo parecido a cuando la gente se queja de que en Tipografía - Longinotti todos los trabajos son iguales. Hay responsabilidad en el cuerpo docente por no saber (si tuviera mala leche diría "no querer") incentivar la búsqueda de nuevos rumbos y en los alumnos por no buscarlos. Esos rumbos tienen que necesariamente que partir del relevo de las cosas que ya se han hecho. Ayer hablaba con una compañera de trabajo que es docente en Yantorno y decíamos que lo que la diferencia última entre el interés real de alguien cuto interés meramente circunstancial, es cuando el primer sujeto se toma un trabajo y un esfuerzo en acceder al objeto. El segundo interés accede al objeto solo porque lo tiene a mano, cuando esto deje de estar disponible, simplemente dejará de acceder a él. Creo que esto es trasladable a cualquier cosa: al arte, a un oficio, a todo.
La prueba de esto es la gran cantidad de diseñadores que una vez terminada la carrera se estancan en lo que aprendieron y no me refieor a hacer un posgrado de marketing y relaciones públicas, sino al diseño gráfico puro y duro, a seguir viendo que pasa en el gremio y estar al tanto de las tendencias (sea para seguirlas o para renegar de ellas).
Tambiéne stá por supuesto la casi nula formación teórica que la facultad dá, pero como en todo lo otro hablamos acá de responsabilidad compartida. La Biblioteca está en el tercer piso y sacar cualquier libro para fotocopiarlo no sale nada más que el esfuerzo de subir esos 2 o tres pisos que te separan de ella. Incluso los podés pedir para llevártelos el find e semana en caso de que los quieras apreciar en la santidad de tu hogar.
